Por ahora es un comentario. Pero no sería para nada extraño. Se dice que en los próximos días comenzarían los trabajos para demoler esta tradicional casona de la estratégica esquina de Moreno y Tucumán y dar lugar a un edificio en altura con atractivas visuales hacia la plaza Pellegrini. Se trata de una de las casonas de antes, la de los abuelos, con sus generosos retiros, sus caminos cargados de expectativas y sus olores a barrio. No es parte del patrimonio arquitectónico, en el sentido de estar catalogada y protegida. Pero sin dudas integra la memoria de todos. Una obra que ha cruzado al menos dos siglos y parece ya estar dispuesta a partir.
El Sur
Desde uno de tus patios haber mirado
las antiguas estrellas,
desde el banco de sombra haber mirado
esas luces dispersas
que mi ignorancia no ha aprendido a nombrar
ni a ordenas en constelaciones,
haber sentido el círculo del agua
en el secreto aljibe,
el olor del jazmín y la madreselva,
el silencio del pájaro dormido,
el arco del zaguán, la humedad
esas cosas, acaso, son el poema.
Jorge Luis Borges