19 de enero de 2011

El puente negro


Revista Arte y Trabajo, octubre 1918 (Gentileza José Marcilese)

En febrero de 1918, la empresa del Ferrocarril del Sud comenzó la construcción de un puente metálico sobre la amplia parrilla de vías ubicadas entre las avenidas Cerri y Parchappe (por entonces conocida como calle de Circunvalación), accediendo de esa manera "al justo pedido del vecindario de Villa Mitre" sobre un paso hacia calle San Martín o San Luis. "La obra reportará un beneficio al vecindario de Villa Mitre y nuestra ciudad, que se encontrarán unidos y mejor comunicados", señaló en febrero de aquel año el diario La Nueva Provincia. En agosto comenzó el montado de las escaleras y el paso peatonal de 6 metros de alto y 105 metros de largo, construido con hierro traido de Inglaterra y piso de madera de lapacho, estaba terminado.
"Es una obra sólida, con materiales de primer orden. El puente marca un digno esfuerzo y un nuevo progreso para Bahía Blanca", señaló la revista Arte y Trabajo.

El acceso al Puente Negro desde la avenida Cerri, cuando el paredón que delimitaba los terrenos del ferrocarril impedía otra forma de curzar las vías rumbo a las Villas.
Desde entonces y hasta hace pocos meses atrás, ese "Puente Negro" seguía siendo el único paso entre las cada vez más pobladas "villas" y el acceso al centro de la ciudad. Ahora, como consecuencia de la obra de extensión de la avenida Cerri, hasta Montevideo, se demolieron los paredones que delimitaban los terrenos del ferrocarril con la calle, dejando abierto entonces un paso a nivel de piso entre las dos avenidas.

Ayer y hoy. La demolición del paredón abrió un nuevo camino
Por eso ahora puede verse ya el camino marcado por el tránsito de la gente --a pie, en bicicleta y hasta en moto-- a un costado del puente, el cual practicamente se ha dejado de usar.

***
La posibilidad del cruce de las vías a nivel del suelo no deja de ser importante si se tiene en cuenta los casi 30 escalones que había que salvar para acceder al puente, una gran barrera arquitectónica para muchas personas que cada día debían transitar por el lugar.

De cargar las bicicletas por las escaleras al paso abierto por la tierra. Queda ahora analizar el riesgo que esto conforma.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

LA DESTRUCCIÓN DEL PAREDÓN SIEMPRE ME APENÓ. NO ME CONVENCE NINGÚN ARGUMENTO, OTRA ACCIÓN HUBIESE SIDO POSIBLE, NO HAY MANERA DE ME AMIGUE CON LO QUE HICIERON.
TIEMBLO....ESPERO NO SE LES OCURRA LA PUESTA EN VALOR DE LA CHIMENEA....
Pd.:Que alguien me explique(como si yo tuviera 5 años) la necesidad de la SEMI? PEATONALIZACIÓN? de calle Alsina.
La abuelita de Bahía Blanca.

LUCIANO dijo...

Mario: me quedé colgado con la entrada (bastante anterior, pero bueno... recién llego de unas vacaciones "desconectadas") de la casona de Tucumán y Moreno. Al respecto, me acordaba del "Historic House Trus of New York" (www.historichousetrust.org) y pensaba que estaría bueno intentar una experiencia similar en una ciudad -ya casi Bicentenaria- como Bahía Blanca, para ayudar a que estas obras sigan desapareciendo.

Lelé dijo...

Siempre me dio miedo ese puente, Mario. No me preguntes por qué.

Unknown dijo...

"Cuando la ciudad como un sistema abierto-incorporando los principios de porosidad del territorio, indeterminación narrativa y forma incompleta-, se vuelve democrática, no en un sentido legal, sino en tanto experiencia física. En el pasado, el pensamiento sobre la democracia se concentraba en cuestiones de gobernabilidad formal, hoy en la ciudadanía y en cuestiones de participación. El problema que enfrentan hoy las ciudades participativas es como crear, en ambitos sin barreras urbanas, la conectividad peatonal con el menor esfuerzo posible.
¿ cómo abrir esos espacios? ¿ como tender las conectividades ? ¿ como generar valor agregado a traves del diseño? ¿ como hacer para que la propuesta invite a la identificación?".....

Mario Minervino dijo...

Lelé, no te pregunto.

Anónimo dijo...

SÍÍÍÍ....A MÍ TAMBIÉN ME DABA MIEDITO...
La abuelita de Bahía Blanca.

el Curqueto dijo...

Estimo que hace casi 100 años se construyó este puente para unir barrios y para evitar accidentes. Ahora, en 2011 hay alguna persona más viviendo en la ciudad. Es de esperar que nadie quede aplastado debajo del tren. Extrarradiar las vías, destinar las instalaciones a espacios culturales, habitacionales y todos los estcéteras que se les ocurran. Suena utópico no?. Si suena utópico. Saludos. Cámara
A propósito...¿Se hizo la limpieza de los depredados barracones del Noroeste?. Recuerdo que la mañana de inicio de obras llovió...nada más.

LUCIANO dijo...

Perdón, donde dice "ayudar a que estas obras sigan desapareciendo", quise decir "ayudar a que estas obras NO sigan desapareciendo" o bien "EVITAR que estas obras sigan desapareciendo". Igual creo que se entendió, pero aclaro por las dudas...

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